DEPRESIÓN

¿Qué es la depresión?

Las alteraciones del estado del ánimo pueden generarnos muchos problemas con nosotros mismos y con los demás. Pueden ir desde sentirnos tristes, apáticos o pasivos, vacíos o irritables, hasta un estado de afectación más profundo, lo que se conoce como una depresión mayor.

Cuando nuestro estado de ánimo está deprimido vemos el pasado, el presente y el futuro con desesperanza y desilusión. Esto nos puede llevar a un estado de indefensión en el que nos cuesta encontrar la motivación para seguir adelante con nuestro día a día. La consecuencia ante esta situación es el sufrimiento de la persona y un acusado malestar, que termina afectando a distintas áreas de su vida (familiar, social, académico, laboral…)

¿Cómo se manifiesta?

Los síntomas de la depresión incluyen: estado de ánimo irritable o bajo la mayor parte del tiempo, dificultad para conciliar el sueño o ganas de dormir en exceso, variaciones en el apetito, con pérdida o aumento de peso, cansancio y falta de energía, sentimientos de inutilidad, autodesprecio y/o culpa, dificultad para concentrarse, sentimientos de desesperanza y pérdida de placer en actividades que antes solían proporcionarlo, entre otros.

¿En qué consiste el tratamiento?

La terapia cognitivo-conductual ha demostrado ser la más efectiva en este tipo de alteraciones. Cuando la depresión se complica, viene acompañada de otras problemáticas, o se hace crónica, podría requerir de una terapia farmacológica complementaria. En cualquier caso, los fármacos por sí solos no han demostrado tanta eficacia como lo ha hecho la terapia combinada, por lo que la intervención psicológica en estos casos optimiza los resultados del tratamiento y se hace necesaria.